Así, como en silencio,
disciplinada,
de blanco y negro,
de arco iris y tormentas me acurrucas.
Así, como sollozando,
desnuda de perjuicios y
falsos rituales, me invitas a
noches placenteras con
encajes de locuras
y perfumes eróticos.
Así, como espejo de mis adentros,
sonríes y me duermo.
Así, con alas de segunda madre,
me cubres,
acaricias,
lloras,hablas flojito y me entrego
en tu descanso.
Así, natural, como en casa,
me miras, te miro,
nos queremos.
1 comentario:
Hermoso y con im particular encanto este poema. Cariños. Magda
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